Existen dos maneras de finalizar una relación laboral (aparte de la finalización misma del contrato): por despido - promovido por la empresa contratante (un despido por razones profesionales, personales o económicas) o por renuncia - promovido por el empleado.
Despido
Una compañía puede despedirte por razones profesionales/individuales o económicas. En el primer caso al empleado se le acusa de haber hecho algo que perjudica a la compañía, que puede ser cierto o no (despido procedente o improcedente) y, por tanto, no podrás seguir trabajando para ella. Con este tipo de despido, la empresa está autorizada legalmente a contratar a una persona para reemplazar al despedido.
Mientras que en el segundo caso, la compañía no requiere los servicios/funciones del empleado más tiempo (despido objetivo). Esto puede ocurrir porque la empresa no tiene el capital suficiente para seguir pagando el sueldo del empleado, porque ha habido una reestructuración en la empresa, o porque ha llegado una tecnología que hace obsoleta la necesidad de tener en plantilla a un empleado para esas funciones. En cualquiera de estos casos, el empleado despedido no puede ser reemplazado por otra persona.
(a) Despido disciplinario
Los despidos individuales son posibles por razones disciplinarias (el empleado ha ofendido a alguien en el área de trabajo) o por razones no disciplinarias (incapacidad profesional, falta de confianza, rehusarse a hacer cambios sustanciales al contrato de trabajo). En Francia este tipo de despidos se denominan “licenciement pour motif personnel”.
Esta finalización de la relación laboral debe estar basada en un caso real y minuciosamente documentada. Deben existir pruebas pruebas que justifiquen el despido. Las siguientes razones no pueden ser usadas como motivo de despido:
- Sexo, situación familiar o nacionalidad
- Grupo étnico, raza o religión.
- Estado de salud o discapacidad (excepto en caso de incapacidad determinada por el doctor industrial).
- Embarazo, maternidad o adopción.
- Accidentes laborales o enfermedad.
- Participación en huelgas o manifestaciones.
- Opiniones expresadas en el contexto de la libertad de expresión de un empleado.
- Afiliación política o participación en actividades del sindicato.
- Ejercer un derecho (ej: contactar al inspector laboral o un tribunal de trabajo).
Entrevistas de despidos formales (Entretien préalable)
Nunca podrá considerarse como válida una citación de despido oral, incluso en presencia de testigos. Para que el despido sea procedente la empresa deberá citarte para una entrevista ya sea por carta entregada en mano, o si te negases a firmar el comunicado, por correo certificado a tu dirección habitual o cualquier otro medio que garantice la evidencia de recepción con cinco días laborales de antelación.
En caso de no recoger o desconocer de la existencia del comunicado de despido, el proceso de despido no se verá alterado, pero no podrá considerarse como causa de despido. Enviando la convocatoria
La carta deberá indicar las razones para la entrevista, así como el lugar, fecha y hora. Serás informado si puede haber o no representantes de personal o consejero del sindicato y donde puedes contactar con uno. Si el despido es disciplinario, es necesario citar al empleado con dos meses de antelación para conocer los hechos y razones que causaron el despido.
Durante la entrevista, la empresa deberá explicar las razones del despido y escuchar las explicaciones que se den. No es obligatorio asistir a la reunión, aunque en la mayoría de ocasiones es recomendable. Deberás ser notificado del despido un día después de la reunión, mediante un correo certificado que indique los motivos del despido.
Apelaciones (Recours)
Si el despido no está justificado o no es justo, podrás apelar en un tribunal de trabajo. Si has trabajado más de dos años y la compañía tiene 11 empleados o más, un juez puede determinar que fuiste despedido injustificadamente y dar así la apelación como válida, por lo que podrás reincorporarte a tu puesto de trabajo con las mismas condiciones de trabajo. Una empresa que se rehúse a devolverte tu puesto de trabajo puede ser obligada a pagar una compensación equivalente a hasta seis meses de salario (habiendo trabajado para la empresa dos años o más) o compensación por daños y perjuicios (con menos de dos años en el empleo).
(b) Despido objetivo
Este se define como despido por razones ajenas al empleado - tales como cambios significativos en la naturaleza del empleo que nacen a través de factores económicos o cambios tecnológicos o el rechazo a aceptar modificaciones en los términos del empleo. Esto es llamado “licenciement pour motif économique”.
Los despidos basados en prácticas profesionales, como un constructor que ha terminando un bloque de apartamentos, no se toman como despidos objetivos. Antes de llevar a cabo un despido objetivo, la empresa ha de hacer todo lo que esté en sus manos para retener o re-emplear a esa persona en una posición similar, y estos esfuerzos se deberán reflejar por escrito.
Renuncias
Puedes renunciar (démission) sin necesidad de proporcionar una justificación a tu empresa. Sin embargo, no deberás renunciar con la intención de causar daños a la empresa. Una renuncia puede ser verbal, por mensaje de texto o por correo electrónico, aunque un correo certificado garantiza la oficialidad de la misma.
Renuncia forzada (démission forcée)
Si renuncias porque no te dan trabajo, tus circunstancias de trabajo han cambiado, te han degradado o instado a irte, manifiesta esto claramente por escrito. En algunos casos, una renuncia forzada puede ser considerada legalmente como un despido.
Renuncia
La decisión tomada libremente de renuncia es un acto definitivo. Una renuncia llevada a cabo en un achaque de emoción del empleado puede ser reversible, pero solo en caso de que el empleado muestre un rápido arrepentimiento de la acción.
Normalmente es obligatorio manifestarlo con cierto tiempo de antelación, según el contrato laboral o el convenio colectivo de trabajo (suele ser 3 meses). En Francia se dan casos en los que te permiten dos horas al día para buscar otro empleo.
Enfermarte durante tu período de aviso no afecta a su duración, pero te pedirán que vuelvas a tu puesto de trabajo en cuanto te recuperes. Tus vacaciones correspondientes anuales están incluídas en el período de aviso.