Cuando empiezas un negocio, tal vez cualquier licencia para la empresa ya esté en activo y tú esperes que tu empresa tenga una buena base de clientes. Lo que tendrías que hacer es registrar un cambio de propiedad en el ayuntamiento local para luego montar negocios sobre los que ya existen.
Cuidado: ¡no todo puede ser cómo parece! Trata de averiguar por qué los propietarios están vendiendo el negocio y, sobre todo intenta saber si el precio es razonable. Un negocio próspero no se vende a precios irrisorios, sin que haya una buena razón. Si el acuerdo ha sido mal manejado y no goza de buena reputación, entonces ¿por qué comprar algo que tiene más responsabilidades que ventajas? Asegúrate de tener por lo menos dos valoraciones independientes y una larga conversación con los propietarios acerca de las razones de la venta. ¿Es una competencia demasiado fuerte o hay proyectos en marcha para construir algo cercano que afectará a tu trabajo? Pregúntale a tu abogado que compruebe el permiso de planeamiento de los competidores en los negocios, o cualquier cosa que pueda tener efectos negativos sobre tus beneficios (a tu cargo).
Algunas de las potenciales desventajas de la compra de una sociedad ya existente es contratar al personal de la misma empresa y estar sujeto a todas las obligaciones del trabajo y seguridad social del dueño anterior. Asegúrate de que tu abogado compruebe qué tipo de contratos hay para el personal, ya que serás tú él que debe cumplirlos. Controla, en particular, que no haya cuestiones pendientes con ningún miembro del personal. Tú y el empleador anterior sois igualmente responsables por alegaciones formuladas antes de la venta y hasta tres años después.
Proceso de compra
El proceso para la compra de una empresa es el mismo para la compra de cualquier propiedad, pero se debe ir adelante con mucho cuidado. En general, debes pagar un depósito del 10% para demostrar su compromiso de compra, y luego pagar el saldo que queda, si todo va según lo previsto, entre 30 y 60 días después. El pago de un depósito garantiza que la empresa se ha retirado del mercado, que es tuya y que todos los controles legales han sido efectuados. Debes obtener un recibo e insistir en que el depósito ha sido pagado en la cuenta del cliente hasta la finalización de la venta, o de un representante o de un Gestor, en lugar de entregárselo al vendedor. Esto es importante, porque el control legal puede mostrar que el vendedor no tiene derecho a vender la empresa, el contrato de alquiler o la propiedad. Una vez que se paga el depósito, el vendedor debe entregar los títulos de propiedad a su abogado, (escritura), o una copia del contrato de alquiler más un inventario de lo que está incluido en el precio. De esta manera, tu abogado puede comprobar a través del registro de la propiedad, si el vendedor es el verdadero dueño o el inquilino y cuál es el estado del alquiler.
Tu abogado también debe comprobar que todas las licencias estén en acto para manejar la empresa legalmente (ver abajo) y, lo más importante de todo, que no haya deudas relacionadas con el negocio o propiedad, ni conflictos con el personal, si se vende la empresa con sus empleados. En España, al comprar o alquilar una propiedad, te asumes también tanto las deudas como cualquier tipo de obligación personal y social.
Si hay problemas con el contrato o si hay algo que escapa a tu control (por ejemplo, si el vendedor no tiene derecho a vender, si la empresa no posee la licencia para ser objeto de publicidad, si hay otros problemas o deudas que no han sido o no pueden ser canceladas, hay que devolver el depósito. Tú sólo puedes perder tu depósito si cambias de idea, sin una razón válida. Si tu abogado ha hecho todos los controles necesarios y cree que todo está en orden, se puede seguir adelante con la realización hasta la fecha acordada, se abonará el saldo y se entregarán las llaves.
Si estás comprando un contrato de alquiler antes de firmar un contrato, asegúrate de que tus responsabilidades como inquilino pueden ser satisfechas. Durante el período del contrato de alquiler, deberás pagar todos los gastos de servicios como por ejemplo agua, electricidad, teléfono, etc.
Licencia
Una de las ventajas principales en la compra de una actividad ya existente es que, en general, se puede iniciar a comerciar de manera más rápida, por que las licencias siguen válidas aunque cambie el dueño. En este caso, simplemente tendrás que registrar un cambio de nombre en el título. Hasta que el tipo de comercio no cambie, no tendrás que esperar semanas o (incluso) meses, sin ninguna garantía.
Un representante no podría vender un comercio sin licencia, pero, desafortunadamente, algunos lo hacen, y a los compradores que no lo saben no les da tiempo abrir las puertas de su local que ya vienen cerradas por la policía.
Si estás comprando un negocio que está haciendo negocio, por ley, debes recibir una licencia para abrir, pero asegúrate de ver y obtener una copia. Tiene que ser visible o por lo menos disponible. Si los propietarios actuales no pueden o no quieren proporcionártela, hay una gran posibilidad de que la empresa esté trabajando de manera ilegal.
Tu agente debe asegurarse de que la empresa posea todas las licencias necesarias, y a continuación, tu abogado o Gestor, debería comprobarlo. No firmes nunca un contrato hasta que no veas los títulos y hayas recibido copias.
Si la compañía está trabajando mientras estás esperando una licencia, todo éso debe ser verificado por las autoridades competentes, en particular, deben investigar sobre la razón del retraso. En algunas circunstancias se venden negocios legalmente sin una licencia. Si éste es tu caso, el abogado debe comprobar si hay algún problema para conseguir una licencia, preguntar por el precio y luego tratar de reducirlo en consecuencia.