A pesar de los continuos esfuerzos del gobierno por incrementar el número de propietarios de inmuebles, los alquileres siguen siendo la forma más común de vivienda en Alemania.
El mercado de alquileres inmobiliarios alemán está muy regulado, y otorga a los inquilinos un amplio margen de protección. Desgraciadamente esto dificulta a los propietarios el desahucio de inquilinos problemáticos o que no pagan el alquiler. Por tal motivo, algunos propietarios son muy cautelosos a la hora de elegir arrendatarios.
Los alquileres de inmuebles en Alemania varían mucho en cuanto a precio y disponibilidad. En las grandes ciudades, particularmente en Hamburgo, Munich y Colonia, los alquileres pueden ser caros. Es muy común que hasta la mitad del salario sea dedicada al pago del alquiler. El tipo de alojamiento requerido por la mayoría de los extranjeros puede ser el más costoso, apartamentos amueblados o al menos semi-amueblados, solicitados con poca anticipación y por periodos relativamente breves. Tampoco es facil encontrar apartamentos para familias grandes por un precio razonable.
Las comparaciones entre alquileres pueden ser hechas en cada pueblo o sector de la ciudad con la ayuda de una tabla llamada Mietspiegel, que lista los precios de alquiler en cada área. En ella puedes comprobar si un precio de alquiler es apropiado para una zona determinada o si cobrar un precio tan alto es ilegal. Puedes encontrar el Mietspiegel en el ayuntamiento local o en la Mieterverein (asociación de inquilinos), ver abajo. Si el alquiler esta por encima del límite legal, pide ayuda a un abogado o asociación de inquilinos para reducirlo.
La oferta y la demanda pueden variar considerablemente durante el transcurso de un año, particularmente en ciudades con una amplia población estudiantil. Al principio del semestre , por ejemplo entre marzo y abril o entre septiembre y octubre, suele haber mucha demanda de alojamiento.