Alemania es uno de los países fiscales más seguros del mundo. Hay muchos impuestos directos e indirectos en Alemania y cualquier persona que desee crear su propia empresa debe estar familiarizada con los más importantes.
Si has vivido en Alemania durante más de 6 meses consecutivos, se te considera un "residente normal" y deberás pagar impuestos acorde con los ingresos y propiedades que tengas. Las personas que no han vivido en Alemania durante más de 6 meses no se consideran residentes fiscales y, por lo tanto, sólo pagan impuestos que concuerden con los ingresos obtenidos en el país.
Pago de impuestos empresariales
Todas las empresas tienen que pagar impuestos sobre a la renta, independientemente de cuánto beneficio tenga su negocio. Las personas que deseen crear una empresa también deben pagar el 25% del impuesto de sociedades, también conocido como Körperschaftsteuer. Un promedio del 18% de sus impuestos se destinará al impuesto comercial municipal o Gewerbesteuer.
Si elige el modelo de negocio AG o GmbH, también tendrá que pagar el 25% del impuesto de sociedades o Körperschaftsteuer. Dependiendo del producto, el 19% o el 7% se destinará al impuesto sobre el valor añadido o Mehrwertsteuer - también conocido como IVA.
Si tu empresa está afiliada a una de las iglesias establecidas en Alemania, el 8% o 9% se destinará al impuesto eclesiástico y el 5,5% al recargo de solidaridad.
La declaración de la renta debe ser presentada antes del 31 de mayo del año siguiente a aquel en que se recibió el ingreso. Si estás utilizando la ayuda de un asesor de impuestos, se emite una extensión automática para presentar hasta el 30 de septiembre. Debes tener en cuenta que las declaraciones tardías pueden resultar en una penalización.