¿Amueblado o sin amueblar?
En general, los lugareños prefieren alquilar y la mayoría son más de apartamentos que de casas. Esto hace que el mercado del alquiler de apartamentos sea increíblemente dinámico, algo que suele alegrar a los que se quieren mudar ya que implica una amplia gama de viviendas y precios, pero también les inquieta a la hora de tomar alguna decisión sobre los alquileres.
La primera pregunta para la mayoría de la gente que quiera firmar un contrato de alquiler debería ser la situación pero la siguiente si quieren que esté amueblado, sabiendo con seguridad que el lugar será habitable inmediatamente o sin amueblar, con la ventaja y la satisfacción de hacer de esta vivienda tu nuevo hogar.
Incluyendo un impuesto como parte del precio por la vivienda amueblada, los propietarios pueden estar más dispuestos a usar esto como una excusa para alquilar cobrando un precio más elevado a los extranjeros. No dejes que esto te desanime, aunque dependiendo de tu situación puede ser más barato y, ni que decir tiene, menos lioso, alquilar una vivienda amueblada que buscar muebles sabiendo que tal vez tengas que venderlos o tirarlos cuando termine el alquiler.
Por otro lado, si puedes negociar de forma efectiva con el propietario, a veces puede incluir algunos objetos esenciales en la casa aunque esté sin amueblar.
Asegúrate de que puedes saber qué pasa con los muebles antes de firmar el contrato y no tengas miedo de pedir fotos si no estás seguro del todo sobre lo que hay en la casa.
Longitud del contrato y requisitos
Los contratos de alquiler pueden ser de distinta longitud y se pueden negociar con los propietarios. La disponibilidad dependerá de la situación ya que los destinos de vacaciones suelen ofrecer más opciones para el alquiler a corto plazo, con cambios en el precio según las estaciones.
El estatus de Santiago como centro de negocios del país significa que los contratos a largo plazo para los empleados extranjeros suelen ser más habituales y, consecuentemente, hay más apoyo para los extranjeros que viven aquí todo el año. Algunas fuentes dicen que algunos propietarios piden alquileres durante más tiempo en viviendas sin amueblar, probablemente debido a que su precio es más bajo.
Asegúrate de que has buscado bien y de que puedes negociar con ellos tú mismo o a través de otra personas. Las facturas y otros gastos no suelen estar incluidos en el contrato de alquiler en general, algo que debes recordar cuando leas los contratos.
Para la mayoría de los alquileres, lo normal es pagar una fianza al propietario, que suele ser el equivalente a un mes de alquiler. También es posible (y esto no es ni mucho menos el caso en todos los contratos) que un avalista chileno tenga que firmar contigo y validar tu contrato en tu lugar o que pidan una fianza mayor. Una vez más, no es lo habitual pero tampoco es raro y los extranjeros que se encuentran con esto no deberían tener problemas si tienen contactos en el país.
Servicios
El precio de los servicios en Chile parece ser más caro de lo que cabe esperar ya que el país no tiene reservas de energía barata. Aunque sí genera el 4’% de su energía con centrales hidroeléctricas, el coste de importar fuentes tradicionales de energía significa que los precios de calefacción, electricidad y agua son una parte importante de todo presupuesto.
Obviamente, tus necesidades y el lugar donde vivas decidirán cuánto usas estos servicios, por ejemplo, los que viven en el sur del país seguramente tengan unas facturas de calefacción más abultadas en invierno en comparación con otras regiones más cercanas al trópico.
Es raro para Sudamérica que el suministro de electricidad y agua estén exclusivamente en manos privadas. La regulación antimonopolio implica que hay una gran variedad de empresas que suministran al público y su cobertura depende de la región.